- Falta de control al ritmo de viaje lento y continuo debido a la limitación de cambios.
- Daño al sistema de dirección, debido a la acción inversa del volante a la acción normal en viaje hacia delante.
- Que se encuentren transeúntes en el límite de los "campos muertos" y dañarlos.
- El daño a las cubiertas del vehículo cuando se acerca a la acera o a objetos con punta.